
Desde enero de 2020 hasta hoy ha pasado de haber 8 satélites con la tecnología XtratuM en el espacio a orbitar un total de 184. El hipervisor desarrollado por fentISS, patrona del Instituto ai2, se ha convertido en el software de sistema español más veces replicado en el espacio.
Ana Rísquez, responsable e Marketing y Comunicación de fentISS explica que “el crecimiento de XtratuM en el último año ha sido notable dentro del New Space. En fentISS estamos muy orgullosos del trabajo realizado y de que una constelación de tal envergadura como OneWeb haya decidido contar con nosotros para su proyecto. Las perspectivas en los próximos años son muy positivas y, aunque sabemos que es largo el camino a recorrer, confiamos en que XtratuM se convierta en el software base de referencia en New Space”.
El pasado lunes 26 de abril, el proyecto OneWeb lanzó su sexto lote de satélites al espacio, que contenía 36 nuevos satélites, todos ellos con XtratuM. Esta constelación ha sido desarrollada con el objetivo de proporcionar servicios globales de Internet de banda ancha a todos los rincones del planeta. En total, en el marco del proyecto, se desplegarán aproximadamente 650 satélites para poder proporcionar una cobertura consistente de Internet por satélite sobre la superficie de la Tierra.
De los 184 satélites con tecnología XtratuM que hay orbitando a 1200 km de la Tierra en este momento, 182 corresponde a OneWeb, uno a la misión EyeSat del CNES y otro a la misión ANGELS, también del CNES.
XtratuM en Marte y Júpiter
En los próximos años (2022-2024) se lanzarán otras misiones científicas de Espacio profundo (MMX a Marte, JUICE a Júpiter, SVOM), de observación de la Tierra (Merlín, SWOT) o comunicaciones (Kineis para IoT) que ya han seleccionado XtratuM para sistemas de a bordo.
JUICE es una misión de la Agencia Espacial Europea (ESA). Según lo planeado, la nave será lanzada en el año 2022 a bordo de un Ariane 5 y alcanzará Júpiter en 2030. Esta misión está destinada a estudiar la compleja interacción de Júpiter y sus satélites durante un mínimo de 3 años. JUICE contará con el hipervisor XtratuM y el sistema operativo LithOS en el espectrómetro de imágenes hiperespectrales MAJIS financiado por CNES y ejecutándose en un procesador LEON3 (GR712 monocore) de la empresa sueca Cobham Gaisler. Esta misión constituirá un gran punto de partida en el estudio del planeta más grande del sistema solar y sus satélites Ganimedes, Calisto y Europa, por lo que poder participar en el proyecto constituye un gran progreso en la reputación de XtratuM como software base de referencia en el espacio.
Rísquez comenta que desde el primer lanzamiento de XtratuM el hipervisor ha experimentado varias mejoras. “En primer lugar, el software ha pasado por un proceso de calificación para sistemas embarcados muy exigente, llamado ECSS (nivel B) que ha incrementado notablemente su fiabilidad y corregido errores. También ha generado una documentación de alta calidad. En segundo lugar, el código se ha reescrito completamente desde cero para dotarlo de mejores prestaciones, más modularidad y hacerlo más mantenible, características esenciales para que se convierta en un producto duradero. Finalmente, se han desarrollado herramientas para facilitar el diseño e implementación de sistemas basados en XtratuM y así preparar el camino a una adopción más amplia por parte del mercado”, explica la experta.
De cara al futuro, los retos que se plantea fentISS con XtratuM van en tres direcciones. En primer lugar, XtratuM debe soportar procesadores más potentes que están continuamente apareciendo en el mercado. En este momento, la empresa participa en tres proyectos para soportar nuevos procesadores como RISC-V o NX-Ultra (este último de la empresa francesa Nanoxplore). “En segundo lugar, es necesario continuar el esfuerzo para crear un entorno de desarrollo para XtratuM que sea más fácil de usar”, comenta Rísquez.
Finalmente, es necesario dotar a XtratuM de las certificaciones y herramientas adecuadas para poder entrar en mercados más masivos como es el aeronáutico (por ejemplo, para aviones totalmente eléctricos y drones), el de automoción (coche eléctrico, vehículo autónomo) o el de Internet de las Cosas (IoT).